DESCRIPCIÓN DE LA PEREGRINACIÓN

En el recorrido tenemos varias paradas a destacar por su interés, particularidad e innovación: 

-Tras la salida de la iglesia se dirigen hacia la Plaza de España, tomando la Avenida de Andalucía para posteriormente girar a la derecha en la carretera A- 363, se hace una parada a la Virgen en un azulejo (aledaño al instituto del pueblo) que conmemora el 75 aniversario (2015) y se le canta una salve.  

Se ha de comentar que los tipos de salves son autóctonas del pueblo de Pruna, ya que tuvieron que diferenciarse de los demás pueblos que peregrinaban a Caños Santos por lo que hay que destacar su aportación al enriquecimiento del folclore andaluz gracias a estas salves con tonada y letra distinta a la salve popular.

-Antes de llegar a la rotonda para entrar a la carretera SE-462 se hace un alto debido a la tradicional colocación un ramo de espigas y amapolas realizada por María José Rodríguez Rodríguez, una simbólica ofrenda hacía la patrona para que ampare las cosechas de los pruneños, también se canta una salve. Esta tradición familiar llevada a cabo por la familia Rodríguez, afincada en Algámitas, la empezó la abuela de María José en torno a los años cincuenta del pasado siglo y es un aspecto único de esta romería.  

Hay que destacar que la imagen va engalanada para la ocasión como pastora y con su pamela vestida por las camareras y mayordoma de la parroquia desde el día de antes. Señalar la singularidad de que es la única Inmaculada Concepción que va vestida con la saya y manto de Inmaculada, pero con la pamela de pastora. Hay varias pamelas que han ido donadas por las familias de los fieles y por la hermandad. 

-Acto seguido se hace la peregrinación hacia la ermita, la Virgen va en una carreta con templete tirada por una pareja de bueyes y vecinas de nuestro pueblo apoyadas detrás de la carreta ayudan a hacer el camino (las flores que adornan la carreta y templete son las flores que como ofrenda se entregaron el día anterior en la ofrenda floral a caballo). Junto a ella van los peregrinos compuestos de caballistas y amazonas, gente a pie, carrozas tiradas por vehículos agrícolas y numerosos vehículos a motor, en este transcurso todos los peregrinos cantan y bailan debido a la alegría que les produce su devoción por su patrona, destacar que desde el momento que sale desde la iglesia hasta la ermita no para de cantar y bailar, algo poco común en un peregrinaje junto a la virgen. 

Estando en la ermita los feligreses bajan a la Virgen para acondicionarla en su altar y se le realiza una misa antes de depositarla, después de esto descansa en su templo hasta las 18:00h para que todo el que quiera pueda llevarle cualquier ofrenda. En este intervalo de seis horas, los romeros comen y beben celebrando el día de su patrona alrededor de ella en los comúnmente denominados “chozos”, pequeñas carpas o incluso debajo de la sombra de los chaparros, donde se juntan amigos y familiares, como podemos ver en las dos siguientes imágenes. En este momento es cuando se hace gala de la hospitalidad del pruneño que acoge a toda persona y con un espíritu de fraternidad lo invita a pasar el día con ellos como si fuese un hermano más. 

Los jinetes durante la celebración de la romería se encuentran paseando por el lugar igualmente hasta las 18:00h donde inician su regreso a la localidad. Tanto el recorrido de la procesión como toda la jornada de celebración de la romería se encuentra cubierta con miembros de los cuerpos de seguridad, bomberos y personal sanitario para que todo se lleve a cabo sin incidentes y de la mejor manera posible. 

La vuelta comienza a las 18:00h debido a que la carretera debe estar libre de tráfico a las 21:00h. Una vez estando en el pueblo camino hacia la iglesia se dilata hasta casi media noche.  

En este trayecto hay un tradicional alto en el camino, en la casa número 16 de Avenida de Andalucía para recibir una petalada. Este acto tan simbólico y lleno de devoción hacia su patrona fue iniciado por nuestra amada vecina María Jesús Zamudio Amaya, más conocida como “La Camperita”, esta iniciativa fue tan solo de ella, por su gran fe a la Iglesia y a la Pura y Limpia. En torno a los años setenta del siglo pasado ella, en sus tiempos mozos, se dedicó a recoger pétalos por los campos para el día de la romería hacer la petalada, esto gustó tanto en el pueblo que los vecinos le ayudaban a recoger más pétalos, pero aun así ella era la única que los lanzó siempre.  Fallecida el pasado año 2020 su tradición aún sigue, como fue su deseo, su nieta tomó el relevo. Siendo la edición de 2022 la primera vez que se ha realizado.

Tras la petalada se dirige hacia la parroquia para el cierre de la jornada, pero los fieles aún con ansias de celebrar el día de su querida patrona, dilatan la llegada sin parar de cantar y bailar para ella. Cuando están a las puertas y se despide a los bueyes, los devotos se arremolinan en torno a la carreta para ser de los primeros en tocarla y poder llevarla a dentro del templo. En su interior se deposita en su sitio y aún siguen festejando su día, incluso después de medianoche como se puede apreciar en las siguientes imágenes.